La imitación de Cristo de Tomás de Kempis fue escrito hace más de quinientos años. Las primeras copias fueron manuscritas y la primera edición está fechada en 1473, dos años después del fallecimiento del autor. En la actualidad este precioso libro pasa de las tres mil ediciones, probablemente solo superado por la Biblia.
El autor fue un monje alemán llamado Tomás Haemerken, que nació en 1379 en Kempis, un pueblo de Colonia. A los 18 años ingresó en el monasterio de los Canónigos Regulares de San Agustín. Era un hombre muy humilde, que pasó su larga vida (murió a los 90 años) entre el estudio, la oración y las obras de caridad. Dedicó gran parte de su tiempo a la dirección espiritual de personas necesitadas de sus consejos.
En ese tiempo no pocas personas deseaban que la Iglesia Católica se reformara y se volviera más fervorosa y más santa. Por contra fueron pocos los que se dedicaron a reformarse a ellos mismos y a ser mejores. Tomás de Kempis se dio cuenta de ello, llegando a la conclusión del que el primer paso que hay que dar para alcanzar esta meta es esforzarse uno mismo por volverse mejor. Y que si cada uno se reforma a sí mismo, toda la Iglesia se va reformando poco a poco.
Kempis con un grupo de amigos formó una asociación piadosa llamada "Hermanos de la Vida Común", y en ella se dedicaron a practicar un modo de vida a la que llamaban "Devoción moderna" y que consistía en emplear largos ratos de oración, meditación, lectura de libros piadosos y en recibir y dar dirección espiritual. Los que pertenecían a esta asociación hacían progresos muy notables y rápidos en aumentar su santidad y la gente los admiraba y los quería.
En sus ratos libres, Tomás de Kempis fue escribiendo este libro que lo iba a hacer célebre en todo el mundo. De esta obra dijo un autor: "Es el más hermoso libro salido de la mano de un hombre" (Dicen que Kempis pidió a Dios permanecer ignorado y desconocido. Por eso la publicación de su libro solo se hizo al año siguiente de su muerte). No lo escribió todo de una vez, sino poco a poco, durante muchos años, a medida que su espíritu se iba volviendo más sabio y su santidad y su experiencia iban aumentando. Lo distribuyó en cuatro pequeños libros. Entre la redacción de un libro y otro pasaron unos cuantos años.
El libro Primero de "La Imitación de Cristo" narra cómo es la lucha activa que hay que librar para convertirse y reformarse y los obstáculos que se le presentan a quienes desean ser santos.
El segundo libro, fue escrito por kempis después de haber sufrido muchas tribulaciones, contradicciones, humillaciones y desengaños, especialmente en el orden afectivo. En este libro segundo enseña cómo hay que comportarse en las tribulaciones y sufrimientos. Utiliza en muchas ocasiones el nombre de Jesús como indicativo del afecto vivo y profundo que siente hacia el Redentor y que desea que también sientan sus lectores.
Cuando redacta el tercer libro ya ha alcanzado un grado más alto en espiritualidad. En él a Jesús lo llama El Señor. Se ha dado cuenta que la santidad no depende solamente de nuestros esfuerzos sino sobre todo de la ayuda de Dios.
El libro cuarto de "La imitación de Cristo" está dedicado a la Eucaristía. Es uno de los más bellos tratados que se han escrito acerca del Santísimo Sacramento. Millones de personas han leído este cuarto libro para prepararse o dar gracias cuando comulgan.
Son innumerables los autores que han pensado que Tomás de Kempis recibió del cielo luces muy especiales al escribir "La imitación de Cristo". Sería la explicación del éxito mundial que este libro ha tenido a lo largo de cinco siglos, entre todas las clases sociales y continentes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario