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domingo, 20 de octubre de 2013

Milagros Eucarísticos




LANCIANO, ITALIA - AÑO 700

Lanciano es una pequeña ciudad medieval, que se encuentra en la costa del Mar Adriático de Italia, en la carretera entre San Giovanni Rotondo y Loreto. Lanciano significa - "Lanza". Se trata de la antigua Anxanum, de los pueblos Fretanos. Aquí se conserva desde hace más de 12 siglos el primero y más grande de los milagros Eucarísticos. 

Descripción del Milagro

La parte de la Hostia en el centro del círculo de carne, aunque era verdaderamente la Carne de Jesucristo, siguió teniendo los accidentes de pan sin levadura después del milagro, tal como ocurre en cada Consagración. Se mantuvo por muchos años, pero se desintegró porque la luneta que la contenía no había sido herméticamente cerrada.

La Carne y la Sangre actualmente visibles no solo son la Carne y la Sangre de Jesús como en toda Hostia consagrada, sino que mantiene hasta la actualidad los accidentes propios de carne y sangre humana. La Carne, desde 1713, se conserva en un artístico Ostensorio de plata, de la escuela napolitana, finamente cincelado.

La Sangre está contenida en una rica y antigua ampolla de cristal de Roca. La Hostia-Carne aún se conserva muy bien. El tamaño de la hostia es como las hostias que el sacerdote eleva en las misas hoy día. Es ligeramente parda y adquiere un tinte rosáceo si se ilumina por el lado posterior. La sangre coagulada tiene un color terroso que tiende al amarillo ocre.

El Milagro de Lanciano es un continuo milagro. La Hostia convertida en Carne y el Vino convertido en Sangre, sin el uso de ningún preservativo, están aún presentes en el relicario.

Historia del Milagro Eucarístico:

Un monje de la Orden de San Basilio, sabio en las cosas del mundo, pero no en las cosas de la fe, pasaba un tiempo de prueba contra la fe. Dudaba de la presencia real de Nuestro Señor Jesús en la Eucaristía. Oraba constantemente para librarse de esas dudas por miedo de perder su vocación. Sufría día tras día la duda. ¿Está Jesús realmente y substancialmente presente en la Eucaristía? Dudaba sobre el misterio de la transubstanciación. Su sacerdocio se convirtió en una rutina y se destruía poco a poco. Especialmente la celebración de la Santa Misa se convirtió en una rutina más, un trabajo más.

La situación en el mundo no le ayudó a fortalecer su fe. Había muchas herejías surgiendo durante esta época. Sacerdotes y obispos eran víctimas de esas herejías, las cuales estaban infestando a la Iglesia por todas partes. Algunas de estas herejías negaban la presencia real de nuestro Señor en la Eucaristía. El sacerdote no podía levantarse de esta oscuridad que envolvía su corazón. Cada vez estaba más convencido, por la lógica humana, de esas herejías.


El Milagro

Una mañana del año 700, mientras celebraba la Santa Misa, estaba siendo atacado fuertemente por la duda y después de haber pronunciado las solemnes palabras de la consagración, vio como la Santa Hostia se convirtió en un círculo de carne y el vino en sangre visible. Estaba ante un fenómeno sobrenatural visible, que lo hizo temblar y comenzó a llorar incontrolablemente de gozo y agradecimiento.

Estuvo parado por un largo rato, de espaldas a los fieles, como era la misa en ese tiempo. Después se volteó despacio hacia ellos, diciéndoles: ¡Oh, afortunados testigos a quienes el Santísimo Dios, para destruir mi falta de fe, ha querido revelárseles El mismo en este Bendito Sacramento y hacerse visible ante nuestros ojos! Vengan, hermanos y maravíllense ante nuestro Dios tan cerca de nosotros. Contemplen la Carne y la Sangre de Nuestro Amado Cristo.

Las personas se apresuraron a ir al altar y, al presenciar el milagro, empezaron a clamar, pidiendo perdón y misericordia. Otras empezaron a darse golpes de pecho, confesando sus pecados, declarándose indignas de presenciar tal milagro.

Otros se arrodillaban en señal de respeto y gratitud por el regalo que el Señor les había concedido. Todos contaban la historia por toda la ciudad y por todos los pueblos circunvecinos. 

La carne se mantuvo intacta, pero la sangre se dividió en el cáliz, en 5 partículas de diferentes tamaños y formas irregulares. Los monjes decidieron pesar las partículas y descubren fenómenos particulares sobre el peso de cada una de ellas. Inmediatamente la Hostia y las cinco partículas fueron colocadas en un relicario de marfil.


Significado Espiritual de este milagro:

Como ha sido comprobado, la Hostia que fue milagrosamente convertida en Carne, está compuesta del tejido muscular del corazón humano (miocardio). Nuestro Señor muestra su Corazón Eucarístico, traspasado por los pecados de la humanidad. Corazón que se deja traspasar por amor. Corazón humano y divino, que sufre y ama. De tantas maneras Jesús nos tiene que recordar que está vivo, que su Corazón arde de amor por los hombres, que su Corazón es de carne, con sentimientos, deseos, ansias por salvarnos y que todavía sufre por tantos desprecios, blasfemias e indiferencias de nosotros pecadores.

Su Corazón es fuente abierta de gracia y misericordia. De este Corazón fluyó sangre y agua, símbolo de liberación y purificación para nuestros corazones. Este Milagro Eucarístico de Lanciano nos llama a la reparación, a ser almas de oración constante, en reparación por tantos pecados, por los nuestros y por los del mundo entero.

Parece que Jesús hoy nos dice - (Habrá alguien que tenga compasión de Mí, que viva con amor, que cumpla con virtud y perfección su vocación, para que la Sangre Preciosa de Nuestro Señor no se derrame en vano...)

Este Milagro Eucarístico es un llamado urgente a la conversión, a reflexionar sobre nuestras vidas, pasadas y presentes. A tomar en serio la vida espiritual, y emprender el camino estrecho que nos lleva a la santidad, a la vida de virtud y perfección. Es una llamada de Dios a dejarnos purificar por el crisol del sufrimiento en nuestras vidas.

Además de que es muy significativo que este milagro sucediera en la ciudad llamada por el nombre de Longinos, el que traspasa el corazón de Jesús, y existe otro paralelo con lo que pasó con Longinos: El sacerdote al contemplar el Corazón Eucarístico de Jesús y su sangre, recibió la gracia de la conversión.

Otro detalle importante es que en este milagro eucarístico Jesús permitió ser crucificado de nuevo. Después del milagro, la Hostia fue clavada a un pedazo de madera, para que al secarse no se enrollara como le sucede a la carne. Aquí estaba El otra vez con clavos en Su Cuerpo, clavado a un pedazo de madera.

Frutos del Milagro:

El milagro que ocurrió en el año 700 fue solo el comienzo. Eso fue hace más de 1250 años. Si después del milagro, la carne y la sangre se hubieran desintegrado, como esperaban muchos, de todas maneras ya en sí mismo era un milagro espectacular. Además de la renovación de la fe del sacerdote y de todos los testigos, Lanciano ha sido un lugar donde muchos han encontrado la fe en la Eucaristía, y otros han aumentado en esa fe.

De inmediato la noticia del Milagro Eucarístico y el testimonio de la transformación del sacerdote se extendió por toda la ciudad y el país. Todas las personas hablaban del milagro. Los peregrinos concurrían a Lanciano para venerar la Hostia convertida en carne y el vino en sangre. Aumentó la fe y devoción al Corazón Eucarístico de Jesús, y se extendió por todo el país. Desde el principio, la Iglesia local aceptó este milagro como un verdadero signo del cielo, y veneró el Cuerpo y la Sangre de Nuestro Señor en la Eucaristía en varias procesiones. Especialmente el día de su fiesta, que es el último domingo de octubre.

La fama del santuario se propagó rápidamente a través de la región y muy pronto toda Italia comenzó a hacer peregrinaciones a la Iglesia. Estas peregrinaciones no han sido solo locales, de todo el mundo llegan personas a venerar el Corazón de Jesús revelado en la Eucaristía.

Manuscritos

A través de los años se han escrito muchos relatos para mostrar la autenticidad del Milagro Eucarístico y milagros espirituales como físicos que se han dado en este lugar. Por haber sido este un milagro tan importante, los antecedentes y la historia de los hechos fueron cuidadosamente registrados.

Hubo un manuscrito en Griego y Latín que confirma el milagro y que fue escrito y certificado en la misma época del milagro. En una cronología de la Ciudad de Lanciano, un historiador escribió que a principios de 1500, dos monjes de San Basilio vinieron a la Iglesia, la cual estaba bajo la custodia de los Franciscanos y pidieron pasar la noche allí. También pidieron ver el pergamino que tenía la historia del Milagro Eucarístico de Lanciano. Los Franciscanos les dejaron estudiar el pergamino durante la noche. Pero a la mañana siguiente los monjes de San Basilio se fueron muy temprano antes de que los Franciscanos se despertaran y se llevaron el manuscrito.

Se cree que el motivo fue que los Monjes Basilianos estaban avergonzados de que uno de los suyos hubiera perdido la fe en la Eucaristía. El hecho es que nunca se recuperó dicho manuscrito.

Investigaciones científicas

En 1574 se hicieron pruebas de la Carne y la Sangre y se descubrió un fenómeno inexplicable. Las cinco bolitas de Sangre coagulada son de diferentes tamaños y formas. Pero cualquier combinación pesa en total lo mismo. En otras palabras, 1 pesa lo mismo que 2, 2 pesan lo mismo que 3, y 3 pesan lo mismo que 5. Este resultado está marcado en una tabla de mármol en la Iglesia. A través de los años se han hecho muchas investigaciones. Nuestro Señor se ha permitido ser pinchado y cortado, examinado a través de microscopio y fotografiado.

A las distintas investigaciones eclesiásticas siguieron las científicas, llevadas a cabo desde 1574, en 1970-71 y en 1981. En estas últimas, el eminente científico Profesor Odoardo Linoli docente en Anatomía e Histología Patológica y en Química y Microscopía Clínica, con la colaboración del Profesor Ruggero Bertelli de la Universidad de Sena, utilizó los instrumentos científicos más modernos disponibles.


Los análisis, realizados con absoluto rigor científico y documentados por una serie de fotografías al microscopio, dieron los siguientes resultados:

*La Carne es verdadera Carne. La Sangre es verdadera Sangre.

*La Carne y la Sangre pertenecen a la especie humana.

*La Carne está constituida por el tejido muscular del corazón. En la Carne están presentes, en secciones, el miocardio, el endocardio, el nervio vago y, por el relevante espesor del miocario, el ventrículo cardiaco izquierdo.

*La Carne es un CORAZON completo en su estructura esencial.

*La Carne y la Sangre tienen el mismo grupo sanguíneo (AB).

*En la Sangre se encontraron las proteínas normalmente fraccionadas, con la proporción en porcentaje, correspondiente al cuadro Sero- proteico de la sangre fresca normal.

*En la Sangre también se encontraron estos minerales: Cloruro, fósforo, magnesio, potasio, sodio y calcio.

*La conservación de la Carne y de la Sangre, dejadas al estado natural por espacio de 12 siglos y expuestas a la acción de agentes atmosféricos y biológicos, es de por sí un fenómeno extraordinario.

Conclusión:

Se puede decir que la ciencia ha dado una respuesta segura y exhaustiva acerca de la autenticidad del Milagro Eucarístico de Lanciano. Jesús nos da, otra vez, Su Corazón por medio de este Milagro Eucarístico. El mismo que fue traspasado por Longinos en el Calvario. El mismo que está en cada Eucaristía en cada Tabernáculo. Es un Corazón traspasado de amor por los hombres, y que solo recibe desprecios, indiferencias, blasfemias, sacrilegios de los mismos hombres. Es manifestación de amor, amor más sublime no existe. Solo Nuestro Señor nos ama de esta forma. Cada Misa, cada Eucaristía es un acto de amor de nuestro Señor. En cada Eucaristía se derraman gracias de salvación para la humanidad.

El Señor nos sigue dando Su Sangre, Su Cuerpo todos los días en la Eucaristía para sanarnos, liberarnos y sustentarnos. Que cada Eucaristía sea un encuentro único con el Corazón de Jesús, encuentro con el Dios de Amor, el Dios que se manifiesta misericordioso, compasivo, y a la misma vez con un Corazón traspasado por los pecados nuestros y de la humanidad.

Qué podemos hacer nosotros, sino consolar al Corazón traspasado de Jesús, no permitiendo que su preciosa sangre sea derramada en vano en nuestras vidas, sino más bien, apropiarnos de las gracias que brotan de su costado abierto, abierto todavía, para que podamos ir a la fuente abierta de salvación que es su Corazón.

Fuente: Corazones.org

¿Lo ocurrido en Lanciano es un hecho único o algo del pasado? No. Se han dado más casos a lo largo de los siglos hasta hoy día. Tal como nos prometió Jesucristo no nos dejará solos hasta el final de los tiempos, siempre nos acompañará, y en su infinita Misericordia para con nosotros nos sigue regalando muestras de su Amor para que nos convirtamos.

En este interesantísimo video se analiza el misterio de los Milagros Eucarísticos de la mano del Dr. Ricardo Castañón (1), psicólogo, ateo, al que un buen día le encargaron un estudio que cambió su percepción de las cosas y se convirtió. 

1-El Dr. Ricardo Casteñón es Doctor en Psicología Clínica, realizó sus estudios universitarios en Alemania e Italia. Está especializado en Medicina psicosomática, Neuropsicofísiología cognitiva. Asimismo, realizó estudios de especialidad de Psicoterapia en Londres, Patologías en Lyon-Francia, Toxicodependencias en Berkeley-California, Bioquímica en Wheil -Alemania, Psicología aplicada en Lovaina-Bélgica.


4 comentarios:

  1. Siempre se ha dicho que la fe mueve montañas y, sin embargo hay cosas que no se comprenden...y por otra parte está la reflexión que nos hace pensar en ello...

    En momentos difíciles de la vida te preguntas: ¿de dónde sacas fuerzas para seguir adelante y luchar contra viento y marea?

    Luego hay otras cosas que también te preguntas: ¿Por qué, Dios permite que ocurran estas barbaridades?

    ¿Por qué? Sólo él lo sabe...

    Te dejo un abrazo grande.

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  2. Pues sí, amiga, hay cosas para las que no tenemos explicación, pero según dice san Pablo todo lo que nos sucede a los que ama el Señor es para bien, aunque a simple vista no lo veamos. A veces no te ha pasado que cuando te pasa una desgracia te preguntas ¿por qué? y al cabo de un tiempo ves que aquello te ha sucedido para bien...

    Te contaré una escena que me impresionó bastante de una película sobre la vida del padre Pío. Él puso como ejemplo lo siguiente: Una madre está sentada bordando y a sus pies está su hijo que en un momento dado levanta la cabeza y observa el reverso del bordado -que es lo que ve desde el suelo al alzar la vista- y tuerce el gesto al ver todos aquellos hilos de colores como enredados entre sí, sin definición, que forman solo como una maraña de colores y le dice a su madre, "pero qué cosa más fea estás bordando, mamá". Entonces su madre baja el bastidor y le muestra la cara buena del bordado, la que ella ve cuando da las puntadas pero que permanece oculta para su hijo que mira desde el suelo y entonces el hijo ve un explendido bordado, con unas figuras bien definidas y cada hilo en su sitio en perfecta armonia y entonces comprende. Nosotros somos el niño que desde este mundo vemos de forma incompleta el plan de Dios.

    A mí me sirvió bastante para conformarme con la voluntad del Señor, aunque no siempre lo consigo.

    Gracias por la visita, amiga. Bendiciones.

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  3. Margarita, tenía pendiente ver este vídeo y por fin esta noche me he puesto a ello. La verdad es que como decís hay cosas que no se explican con la razón y por eso cada vez más nos convencemos en que debemos dejarnos llevar y confiar en la divina providencia.
    Los desastres naturales, las muertes masivas, eso tampoco se entiende.

    Un abrazo, amiga, espero que estés muy bien.
    Conchi.

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    1. Conchi, perdona. Estaba convencida de que te había respondido al comentario. Estoy de acuerdo, amiga, hay muchos misterios y no los podemos explicar.

      Tal cual lo dices, amiga. Todas estas cosas, además, están anunciadas. Incluso hay varias profecías que hablan de dos Papas, y ya ves... No sabemos si se estarán haciendo referencia a los actuales, porque solo Dios lo sabe, pero no deja de ser curioso que se haya dado tal caso después de tantos siglos. Debemos confiar y ponernos en las manos de Él, porque parece que vendrán cosas no muy buenas, y a no tardar mucho. Aunque, repito, eso solo Dios lo sabe.

      Un abrazo y que Dios te bendiga.

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