ORACIÓN A NUESTRA
SEÑORA AUXILIADORA DE LAS ALMAS DEL PURGATORIO
¡Oh Gloriosa
Virgen María!, creemos que Dios os dio todas las gracias para suavizar las
penas de las almas del purgatorio e incluso para liberarlas, por eso acudimos a
vos con confianza.
O Virgen María, venimos a
llamar a la puerta de vuestro corazón maternal. Mirad las penas que enduran
estas almas en el fuego purificador, mirad los tormentos de estas almas
privadas de la visión de Dios, que Le vieron un corto instante, mirad la
impotencia de estas para procurarse el mínimo alivio, mirad su resignación y su
sumisión a la justicia divina.
O Madre de misericordia,
os suplicamos visitéis estas pobres almas y les deis alivio y consuelo.
O Virgen poderosa, cuyos méritos
son inmensos, abreviad el tiempo de su expiación.
O Reina del cielo, nos
atrevemos a pediros que liberéis todas las almas posibles, a cada una de
vuestras visitas.
O Madre de bondad, os
rogamos más especialmente por las almas olvidadas del purgatorio. Amén.
ORACIÓN A SAN MIGUEL
ARCÁNGEL
Gran San Miguel, que Dios
encargó de introducir en el cielo las almas de los elegidos, te ruego por todos
aquellos que quise y que ya no están.
Dignaos visitarles,
asistirles y socorrerles en medio de las llamas que les queman, en la oscura
prisión donde están. Haced que Dios las admita lo más pronto posible en el
lugar del enfriamiento, de la luz y de la paz.
Y cuando venga para mi
alma, la hora de bajar a esa oscura estancia, os conjuro, interceder por ella y
venid a ayudarla. Amén.
ORACIÓN AL SANTO
CURA DE ARS
Oh Santo Cura de
Ars, que Dios todopoderoso y misericordioso te hizo admirable por tu celo
apostólico y tu constante devoción a la oración y penitencia, obtén de todos
los sacerdotes, la misma virtud y celo apostólico.
Vos, que tuvisteis un corazón puro, interceded por
todos los sacerdotes, para que conserven sin mancha el carácter de su
ordenación. Que obtengan y mantengan una admirable devoción a las Ánimas
Benditas del Purgatorio, y se dignen en ofrecer el Santo Sacrificio de
Que sean un ejemplo de firmeza en la fe e intrépidos
en la propagación del Reinado de Nuestro Señor en la tierra.
Que propaguen sin desfallecer
Os pedimos humildemente por vuestra intercesión,
que, a través de nuestras oraciones, podamos aliviar las almas del purgatorio,
en particular la de los sacerdotes, obispos y papas que aún permanecen en él.
Por Cristo Nuestro Señor. Amén.
ORACIONES PARA CADA DÍA DE LA
SEMANA
Señor, Dios todopoderoso,
os suplico por la sagrada sangre que Jesús, vuestro divino Hijo ha derramado en
la flagelación, liberad las almas del purgatorio, en particular el alma que está
a punto de entrar en el cielo, afín que, llegando a la gloria eterna, os alabe
y bendiga para siempre jamás. Así sea.
Padrenuestro, Avemaría, Salmo
de Profundis
Martes
Señor, Dios todopoderoso,
os suplico por la sagrada sangre que Jesús, vuestro divino Hijo, ha derramado
cuando le coronaron con espinas, liberad las almas del purgatorio, en particular
el alma que esté condenada más tiempo, afín que, su pena siendo menguada, no
tarde en alabaros en la eterna bienaventuranza. Así sea.
Padrenuestro, Avemaría,
Salmo de Profundis
Miércoles
Señor, Dios todopoderoso,
os suplico por la sagrada sangre que Jesús, vuestro divino Hijo, ha derramado
en las calles de Jerusalén llevando la cruz, liberad las almas del purgatorio,
en particular el alma cuyos meritos sean los mayores, afín que, sobre el trono
de gloria que le está reservado, os alabe y bendiga para siempre jamás.
Así sea.
Padrenuestro, Avemaría, Salmo
de Profundis
Señor, Dios todopoderoso,
os suplico por el precioso cuerpo y la sagrada sangre que Jesús, vuestro divino
Hijo, ha dado con sus manos a sus apóstoles la vigilia de la pasión para que
les sirvan de comida y de bebida, y que él dejó a su iglesia para ser un
sacrificio perpetuo y la comida de su pueblo fiel, liberad las almas del
purgatorio, en particular el alma que fue más abnegada a este misterio de amor,
afín que, llegando a la gloria eterna, os alabe y bendiga para siempre
jamás. Así sea.
Padrenuestro, Avemaría, Salmo
de Profundis
Señor, Dios todopoderoso,
os suplico por la sagrada sangre que Jesús, vuestro divino Hijo, ha derramado
el día de su crucifixión sobre la madera por sus manos y sus pies santos,
liberad las almas del purgatorio, en particular el alma por la cual estoy
obligado a rezar, afín que no me reproche haber retrasado su entrada a vuestra
gloria para que os alabe y bendiga para siempre jamás. Así sea.
Padrenuestro, Avemaría, Salmo
de Profundis
Señor, Dios Todopoderoso,
os suplico por la sagrada sangre que salio del costado de Jesús, vuestro divino
Hijo, bajo los ojos de su Santísima Madre, liberad las almas del purgatorio, en
particular el alma que fue la mas devota al Sagrado Corazón de Jesús y de
María, afín que sea admitida en vuestra Gloria, para alabaros y bendeciros, Tú
que reinas por los siglos de los siglos. Así sea.
Padrenuestro, Avemaría, Salmo
de Profundis
Señor, Dios todopoderoso,
os suplico por la Sagrada Sangre que Jesús, vuestro Divino Hijo, ha derramado
en el Huerto de los Olivos, liberad las Almas del Purgatorio, en particular el
alma la más abandonada, afín que, llegando a la Gloria Eterna, os alabe y bendiga para
siempre jamás. Así sea.
Padrenuestro, Avemaría, Salmo
de Profundis
SALMO DE PROFUNDIS (Salmo 129)
Desde lo más profundo clamo a Ti, Señor: oye, Señor,
mi voz.
Estén atentos tus oídos a la voz de mi plegaria.
Si tienes en cuenta, Señor, las maldades: Señor,
¿quién te podrá resistir?
Mas en Ti se halla la clemencia: y en vista de tu
ley confío en Ti, Señor.
En la promesa del Señor se apoya mi alma: en el
Señor pone su esperanza.
Desde el amanecer hasta la noche, espere Israel en
el Señor.
Porque en el Señor está la misericordia; y en su
mano hay abundante redención.
Y Él es el que redimirá a Israel de todas sus
iniquidades.
Amén.
ORACIÓN
DE SANTA GERTRUDIS LA GRANDE
Nuestro
Señor le dijo a Santa Gertrudis
Padre Eterno, yo te ofrezco la Preciosísima Sangre de tu Divino Hijo Jesús, en unión con las misas celebradas hoy día a través del mundo por todas las Benditas Ánimas del Purgatorio y por todos los pecadores del mundo.
Por los pecadores en
ORACIÓN AL FALLECIMIENTO
DE UN SER QUERIDO
¡Oh Jesús, único consuelo en las horas eternas del dolor, único consuelo, sostén en el vacío inmenso que la muerte causa entre los seres queridos! Tú, Señor, a quién los cielos, la tierra y los hombres vieron llorar en días tristísimos; Tú, Señor, que has llorado a impulsos del más tierno de los cariños sobre el sepulcro de un amigo predilecto; Tú, ¡oh Jesús! que te compadeciste del luto de un hogar deshecho y de corazones que en él gemían sin consuelo; Tú, Padre amantísimo, compadécete también de nuestras lágrimas. Míralas, Señor, cómo sangre del alma dolorida, por la pérdida de aquel que fue deudo queridísimo, amigo fiel, cristiano fervoroso.
¡Míralas, Señor, como tributo
sentido que te ofrecemos por su alma, para que la purifiques en tu sangre
preciosísima y la lleves cuanto antes al cielo, si aún no te goza en él!
¡Míralas, Señor, para que nos des fortaleza, paciencia, conformidad con tu
divino querer en esta tremenda prueba que tortura el alma! ¡Míralas, oh dulce,
oh pidadosísimo Jesús! y por ellas concédenos que los que aquí en la tierra
hemos vivido atados con los fortísimos lazos de cariño, y ahora lloramos la
ausencia momentánea del ser querido, nos reunamos de nuevo junto a Ti en el
Cielo, para vivir eternamente unidos en tu Corazón. Amén.
ORACIÓN POR NUESTROS
SERES QUERIDOS
Oh buen Jesús, que durante toda tu
vida te compadeciste de los dolores ajenos, mira con misericordia las almas de
nuestros seres queridos que están en el Purgatorio. Oh Jesús, que amaste a los
tuyos con gran predilección, escucha la súplica que te hacemos, por la intercesión
de
Concédeles, Señor, el descanso
eterno y que les ilumine tu luz perpetua.
Que las almas de los fieles difuntos
por la misericordia de Dios descansen en paz. Amén.
ORACIÓN DE RECOMENDACIÓN
DEL ALMA A CRISTO
Señor, te encomendamos el alma de tu siervo(a) ... (mencione su nombre) y te suplicamos, Cristo Jesús,
Salvador del mundo, y por la intercesión de
Reconócela, Señor, como criatura
tuya; no creada por dioses extraños, sino por ti, único Dios vivo y verdadero,
porque no hay otro Dios fuera de Ti ni nadie que produzca tus obras.
Llena, Señor, de alegría su alma en
tu presencia y mira con misericordia sus pecados pasados y de los excesos a que
la llevó el ímpetu o ardor de la concupiscencia.
Porque, aunque haya pecado, jamás
negó al Padre, ni al Hijo, ni al Espíritu Santo; antes bien, creyó, fue celoso
de la honra de Dios y adoró fielmente al Dios que lo hizo todo. Amén.
No hay comentarios:
Publicar un comentario